jueves, 4 de octubre de 2012
ATRAEME A TI JESUS QUERIDO
Condúceme Señor a tu camino
Atráeme Señor a tus brazos santos
Sella en tu morada mi destino
Consuela en tu dulce faz todos mis llantos.
Háblame Señor en mi silencio triste
Alumbra mi oscuridad desamparada
Amarra todo mi ser a tu pecho inerte
Atrapa mi corazon con tu mirada.
Marca mi andar, todo mi sino
Guíame en la vereda, Jesús querido
Señala con tu huella mi destino
Llévame de tu mano conducido.
Ampárame Señor en tu pecho herido
Conforta mi pesar en tus heridas
Sana mi dolor en tu amor sufrido
Revíveme para que en mí, Señor tú vivas.
miércoles, 26 de septiembre de 2012
JESUS, EL MESIAS!
Pequeño e inocente, inofensivo te veían,
tu carne perseguían mas tu proposito aún no se cumplía
crecías en estatura y en sabiduría
veías y comprendías, como un humano tu vivías
sentías la muerte llegar, la hora de tu sangre derramar
mas tu boca no abrías, un silencio solo se oía
...Todos te seguían, mas no todos te creían
todos te aclamaban, mas no todos te amaban
algunos te aceptaban y otros te rechazaban
tu santidad buscaban a causa de su dolor
su conveniencia mirabas mas no su corazón
dispuesto a darlo todo, la hora se acercaba
...Y el momento en el que el peso del mundo tu cargabas
lagrimas de sangre derramaban de tus ojos
sólo tu sabías como iba a ser tu despojo
observabas desde lejos con tristeza y con dolor una cruz olvidada
pero algo mas fuerte que eso te hacía olvidar el temor
ya nada importaba el momento había llegado
Los que creían y los que no,
los que te amaban y los que te odiaban
aquellos dispuestos a darlo todo y los que tu mal disfrutaban
tus hermanos, tu madre y un romano observando
todos en escena esperaban que tu voz se escuchara!!
PADRE POR QUE ME HAS DESAMPARADO?
PERDONALOS POR QUE NO SABEN LO QUE HACEN...
EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPIRITU..
Y solo en instantes...sangre derramar y el silencio escuchar a un inocente clavar y cadenas quebrantar y el sueño se cumplía al ver tu muerte llegar
de jesús el MESIAS nuestras vidas perdonar!!
Nidia Flores
lunes, 24 de septiembre de 2012
BENDITA CRUZ
Enredada en mi dolor jadeante de amargura
Regresaba pasos que jamás debí haber dejado
Pensé que mi justicia era la correcta
Creí que mi mano cegaría mi dolor
Helando de soledad mi corazón
Hasta aquel día que recordé
Que tú me amabas
Aquel día que recordé que tú me amabas
Que jamás me perderías,
Que nunca me soltarías
Cargada de dolor llegué a tu cruz
Con vergüenza no podía mirar tu rostro
De pronto sentí un único calor
Que lograba desleír mi hielo
Era esa sangre fluyendo del calvario
Penetraba como espada en mi alma
Hería y quebraba mi orgullo
Quemaba los canceres malignos
Que a mi vida amenazaban
Llevándose todo en su cruel muerte.
Dina Ode Rodriquez
lunes, 9 de abril de 2012
NO SER PARA QUE CRISTO SEA
Qué quiero mi Jesús?... Quiero quererte,
quiero cuanto hay en mí, del todo darte
sin tener más placer que el agradarte,
sin tener más temor que el ofenderte.
Quiero olvidarlo todo y conocerte,
quiero dejarlo todo por buscarte,
quiero perderlo todo por hallarte,
quiero ignorarlo todo por saberte.
Quiero, amable Jesús, abismarme
en ese dulce hueco de tu herida
y en sus divinas llamas abrasarme.
Quiero, por fin, en Ti transfigurarme,
morir a mí para vivir tu vida,
perderme en Ti, Jesús, y no encontrarme.
(Pedro Calderón de la Barca)
lunes, 12 de marzo de 2012
LA PREEMINENCIA DE CRISTO
Directo del cielo descendió a la tierra
amando al mundo que le aborreció
dejó su gloria, la áurea esfera;
do solo alabanzas se le prodigó.
Oh, Hijo amado del Padre eterno
a su posición El no se aferró
vistióse de barro, cubrióse de heno
de su magnificiencia El se desprendió.
Y forma de hombre, el verbo eterno
el dador de la vida, por amor eligió
viviendo en el mundo retó al averno
y sobre el pecado, invicto, vivió.
Amó a los pobres, sanó al enfermo
y el Evangelio glorioso nos dio
El trajo la vida, derrocó el averno
y aún a la muerte, glorioso, venció.
Sufrió la agonía del cruel tormento
y sobre la cruz mi paz El compró
derramó su vida en mudo lamento
y al mismo infierno, El lo despojó.
Subiendo a lo alto, llevó ante el Padre
a los que durmieron en su expectación
sentóse a su diestra gloriosa y afable
donde El reina sobre su creación.
Oh, yo te adoro, bendito y amado
todopoderoso, cordero y león
Aquel que vencistes y te has coronado
y que has recibido plena exaltación.
Jesucristo glorioso, Señor de Señores
el Rey de los Reyes, tan lleno de honor
de un nombre poderoso, pleno de loores
del Padre por siempre, serás poseedor.
viernes, 6 de enero de 2012
ZANAHORIA, HUEVO O CAFE?
Una hija se quejaba con su padre acerca de su vida y cómo las cosas le resultaban tan difíciles. No sabía cómo hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencida. Estaba cansada de luchar. Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.
Su padre, un chef de cocina, la llevó a su lugar de trabajo. Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre fuego fuerte. Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo. En una colocó zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos de café.
Las dejó hervir sin decirpalabra.La hija esperó impacientemente, preguntándose qué estaría haciendo su padre. A los veinte minutos el padre apagó el fuego. Sacó las zanahorias y las colocó en un tazón. Sacó los huevos y los colocó en otro plato. Finalmente, coló el café y lo puso en un tercer recipiente.Mirando a su hija le dijo:
"Querida, ¿qué ves?"
-"Zanahorias, huevos y café" fue su respuesta.
La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias. Ella lo hizo y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera. Luego de sacarle la cáscara, observó el huevo duro. Luego le pidió que probara el café. Ella sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma.
Humildemente la hija preguntó:
"¿Qué significa esto, padre?"
El le explicó que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad: agua hirviendo, pero habían reaccionado en forma diferente. La zanahoria llegó al agua fuerte, dura; pero después de pasar por el agua hirviendo se había vuelto débil, fácil de deshacer. El huevo había llegado al agua frágil,su cáscara fina protegía su interior líquido; pero después de estar en agua hirviendo, su interior se había endurecido. Los granos de café sin embargo eran únicos; después de estar en agua hirviendo, habían cambiado al agua.
"¿Cual eres tú?", le preguntó a su hija.
"Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿cómo respondes? ¿Eres una zanahoria que parece fuerte pero que cuando la adversidad y el dolor te tocan, te vuelves débil y pierdes tu fortaleza? ¿Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable? Poseías un espíritu fluido, pero después de una muerte, una separación, o un despido te has vuelto duro y rígido? Por fuera te ves igual, pero ¿eres amargado y áspero, con un espíritu y un corazón endurecido?¿O eres como un grano de café?
El café cambia al agua hirviente, el elemento que le causa dolor. Cuando el agua llega al punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor. Si eres como el grano de café, cuando las cosas se ponen peor tú reaccionas mejor y haces que las cosas a tu alrededor mejoren.
Fuente: DICANEC (Diccionario de anécdotas e ilustraciones/ E-Sword la espada electrónica)
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